miércoles, 11 de noviembre de 2009

El Pleito. por ricardo piaggio

Amanecemos bien, fui prisionero de un ruego muy cercano el cual me tuvo poco tiempo en sus barrotes, tras las rejas. Prefería estar tras las rejas de ese ruego y no salir, por que sabia que si salía todo seria maldad.
me trataron muy feo, las llagas que te ofrece el fuego eran caricias a lado de ese ruego tan cercano, me llamaron por un momento ladrón sin haber tomado algo que no era mío, sentía eso y mas, desilusión.
Nunca fui esa estrella para ella, esa perfecta figura con 5 puntas relacionada con la magnificencia que la caracteriza, pero en fin siempre fue linda conmigo, pero siempre pensó mal de mi.
No lo podía aguantar, pero lo tenia que hacer como prioridad como un antihistamínico para esa alergia llamada reproche, ahora siento decepción, nunca fui nada, me refregaron en la cara que era un bueno para nada, como aquel dedo meñique que no lo usas, como se sentirá el? Como la razón del loco, no podía mirarla a los ojos, esas perlas lindas que solo las relacionaba con brillantes y un gran misterio guardado en ellas, no podía. Solo quería librarme, pero tan solo faltaba poco, solo un poco mas.
esa liberta solo seria ilusión, esa libertad solo seria la mente de una niña de 12 años esperando la casa magnifica de la barbie , esa libertar no seria la mas grande sino el principio de una nueva refregada en cara, que soy un patán, eso si lo voy a recordar toda mi vida. Tan solo el luchar con espada, contra mi memoria y luego limpiar toda esa sangre derrochada por la guerra interna, eso ayudaría lo se.
-Por eso te escapaste
-permanezco tranquilo
-Por eso te fuiste
-no la miro
-No te importo!
-dolor pero tranquilo
-Si yo no te importo menos te importa tu hermano
-desesperación
-No eres nada, no me importas solo eres desgracia, eres igualito al otro.
Solo pedía a gritos internos, algo, solo un poco de tranquilidad tan solo un pedazo de ese muñeco que lo armaste con piezas tan pequeñas reuniendo esa magnifica combinación de tranquilidad, paciencia, y ganas. Por que alguien tan cercano a ti te puede tratar de esa forma?
sigo andando tras las rejas, pero ya no en la celda si no en toda la prisión, con un poco mas de absurda libertad y fríos barrotes.
Solo quiero pan y agua para poder meterme en el pan y remojarme en el agua hasta que se desintegre por completo, es lo mejor cuando quieres algo de tranquilidad y dejar de pensar en esa ilusión de la pequeña casita de plástico.
Paso todo por mi mente, agujeros comunes, cuerdas, esas bolitas pequeñas de cobre o acero que causan tanto daño al juntarlas con la maquina y el odio, no podía pensar mas en eso, solo quería mi antihistamínico natural, soy muy joven para esto.
Ahí viene y tengo miedo, estoy en el patio de la cárcel y siento mucho temor combinado con el frio y los problemas no seria nada bueno que se junten con las bolitas de fierro esas.
Todo lo que se puede hacer para hacer sentir bien a alguien son migas, son los mas pequeños granos de arena comparándolos con un universo infinito.
Por eso estoy aquí en mi cárcel retorciéndome el cerebro, con la mente torcida y distorsionada yo se que mi sentencia es corta, pero como la señora maldad lo dice siempre hay un pero para todo, es una regla. Solo mi abogada la señorita (linda ella) llamada por algunos psicología pfff… absurdo nombre, solo ella me ayudaría, quiero hablar con mi abogado.
Yo se que no soy el único preso, hay muchos pero cada uno de ellos en sus cárceles algunas de oro, algunas de tierra, algunas de tragedia, todos viven en celdas distintas, algunos con compañía, algunos completamente solos, como yo que soy el único comparándome con el sol en nuestro sistema que no es nuestro es de el y que por cierto es maravilloso, pero solo!
Los reos que eran compañeros míos no esta, se fueron y por eso me siento como el dios de mi de mi propia y única religión, el único.
En mi viaje me di cuenta que los otros reos en sus distintas cárceles no tienen pan y agua, no pasaban por el proceso de meterse en el pan y remojarse para lo que les conté, sino tenían la tranquilidad en todo el sentido de su palabra, muy por fuera de su lucha interna, es una guerra aparte.
Sofocación, desesperación, ansiedad, todo sentí y lo voy a seguir sintiendo,
por que no hablas, le tienes miedo al miedo?
No te confundas es distinto…
ella no es miedo, es terror y amor puro, es difícil que logren comprender esto aunque como dije líneas arriba siempre hay un pero para todo por la ley de la señora esa. Nunca lo sabrán todo…
la pasión te saluda, el cariño… hace mucho que no siento eso pero no desespero siempre hay un final feliz lleno de amor y tranquilidad.
No lo vas a ver otra vez, el papel dura mucho pero no para siempre
eso de las estrellas es imposible.
Terminando el día, con propio misterio consigo las llaves, esa libertad absurda se apoderara de mí, pero por cuanto tiempo? Que no te importe solo disfrútalo!





Buenas Nochas*

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